domingo, 22 de enero de 2012

MODOS DE DISCURSO


NARRACIÓN
Las Bodas de Oro de mis abuelos
Un día mientras estábamos comiendo en un restaurante en el centro de la ciudad de México mi mamá y mi tía comenzaron a platicar sobre mis abuelos, que en ese año cumplirían cincuenta años de casados. Mi mamá comento sobre unos conocidos a los que sus hijos les organizaron sus bodas de oro y mi tia no tardo en decir -¿Por qué no les organizamos un fiesta a papá y mamá?- Mi mamá de inmediato acepto y empezaron a buscar una fecha, por suerte estábamos de vacaciones y aparentemente había tiempo. Entre todos empezamos a dar ideas de que grupo tocaría y que comida se serviría. Mientras tanto mi mamá seguía buscando el día empezamos a organizarla, de repente mi mamá nos dijo que la mejor opción sería que fuera el 7 de agosto. Era demasiado pronto pues faltaba casi una semana y media.
Mi mamá y mi tia mencionaron que la mejor propuesta sería que la fiesta se realizara en el jardín de la casa de mis abuelos pues ya no habría lugar en un salón. Para esto mis abuelos no tenian ni la menor idea de lo que sucedería.
Todos andábamos locos por las compras y a la vez nerviosos, pues sentíamos que el tiempo y los días no eran suficientes.
En una de las tantas reuniones que teníamos se comento sobre el grupo que se contrataría, ya había algunas propuestas hasta que uno de mis tíos menciono que tenía que ser especial, pues mi abuelo es una persona que gusta del danzón. Mi mamá nos platico que a mi abuelo le fascinaba la danzonera de Sebastián Cedillo, el problema era que su costo por tocar era muy elevado. Como pudieron mi mamá y mi tía juntaron el dinero y contrataron a la danzonera y otro grupo que alternaría.
Los días pasaban y la fecha ya estaba muy cerca, mis tíos y toda mi familia andaban invitando hasta que una noche antes de la fiesta les caímos con la sorpresa de su fiesta. amis abuelos al principio se espantaron e incluso empezaban a enojarse pero cuando supieron que ya todo estaba listo se emocionaron.
Fue un día inolvidable pues vi que todos lo disfrutamos y bailamos.

DESCRIPCIÓN
Mi secundaria
Mi ex secundaria se llama "Altepecalli" que significa "La casa del pueblo" esta en nahuatl y está incorporada a la modalidad "para trabajadores", era sólo de un turno y pronto se convetitiria en tiempo completo, lo cual a mi aun no me toco. Era grande y contaba con dos edificios de tres pisos, pero cuando estaba en segundo grado comenzaron las obras para construir un tercer edificio, el cual terminaron en menos de un año.
Contaba con un patio principal, una cancha de básquet y una de futbol. Es grande y tenía muchos salones entre los que destacaban los salones de talleres que eran: Industria del Vestido, Taquimecanografía que paso a ser Ofimática que era donde yo estaba, había computadoras y también maquinas de escribir, también había Estructuras Metálicas, Carpintería y Artes Plásticas en donde también estuve solo que era el único taller con un salón pequeño.
Además de todo mi ex secundaria cuenta con cooperativa y un laboratorio así como gradas techadas. Era o es considerad una de las mejores de la zona de Milpa Alta pues era de tipo "Alto Rendimiento". Algunos profesores era muy estrictos.
Nuestro uniforme no era como cualquier escuela pues se complementaba con una corbata.
La escuela está pintada en colores azul rey y blanco. Era muy organizada pues cada vez que pintaban o grafiteaban al día siguiente ya estaba otra vez en perfectas condiciones. Lo más divertido era en que la última parte de la escuela había una rampa en donde muchos jugábamos.
Creo que mi estancia fue muy agradable y feliz, pero sobre todo inolvidable.

ARGUMENTO
Manifestación de Profesores.
Como hija y hermana de docentes me indignan los cambios que se vienen, en todo caso de que el C. Enrique Peña Nieto llegara a ganar la presidencia y no es que esté a favor de algún otro partido pero es de suma importancia saber que el ahora candidato piensa volver a todas las escuelas primarias de tiempo completo, lo que molesta a muchos profesores es que esto  les afectara a los docentes en el  turno vespertino  y además de esto, las escuelas no se darán abasto pues recibirían tanto a alumnos de la mañana como de la tarde y serán muchísimos alumnos y claro, muchos más grupos, y por tanto las escuelas pequeñas tendrán que cerrar sus puertas.
Otro factor por el cual el miércoles 18 de enero los docentes se irán a paro es que únicamente en el Distrito Federal será en donde se aplique el examen universal pues los profesores de los estados se han movilizado para que en sus entidades no sea aplicado el examen. Y no es que los docentes del D,F tengan miedo a la aplicación sino que si se va a aplicar entonces se debería hacer en todo México y no sólo en el D.F.
Por esto y muchos otros factores los docentes de la Ciudad de México se irán a huelga el próximo 18 de enero.

EXPOSICIÓN
La Calle de Madero
Desde tiempos del virreinato la calle de San Francisco y Plateros se mostraba soberbia  en su trazo que corría de San Juan de Letrán y detenía su destino en la Plaza mayor. A su paso edificios majestuosos: el Palacio de Iturbide, La Profesa, San Felipe Neri. Su nombre daba fe de la presencia de uno de los conventos más impresionantes de toda la América hispana: San Francisco el Grande.

En 1856, la picota de la Reforma dio cuenta de la mayor parte de la magna construcción al abrir calles sin sentido a través de sus límites y su legendaria majestuosidad quedó plasmada tan solo el nombre de la calle por donde se podía acceder a la iglesia principal.
San Francisco tenía su historia: jefes y caudillos apresuraban su marcha para cabalgar orgullosos a lo largo de a calle que, por siglos fue la más importante de la Ciudad de México. Testifico el paso de Iturbide y su Ejercito Trigarante, de Santa Anna acompañando el cortejo finebre de su pierna y de don Porfirio y sus científicos, así como el arribo apoteótico de Madero al frente de su revolución triunfante.
En diciembre de 1914, el Centauro del Norte, Pancho Villa, tomó posesión de la famosa calle y decidió cambiarle el sentido religioso de su nombre para otorgarle una connotación de religiosidad cívica. Con pistola en mano pidió una escalera, subido en ella retiro de su lugar la placa que bautizaba a la calle como San Francisco, esquina con Isabel La Católica y la rebautizó con el nombre de un personaje que a sus ojos alcanzaba también la santidad: Madero. 
Para asegurarse que nadie intentaría cambiar su nueva denominación. Villa lanzó una amenza al mundo y a la eternidad: Juró acabar con todo aquel que se atreviera a retirar el nombre de su santo. A casi cien años del cambio de nomenclatura se lee en sus esquinas: Madero y la santidad se entiende al inicio de la calle, donde se levanta aún, majestuoso, el templo de San Francisco. Ambos vencieron al tiempo.

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